La maduración psicológica del hombre de nuestros días requiere más tiempo que la del hombre de generaciones anteriores porque, entre otras razones, las expectativas de vida han aumentado considerablemente. Treinta años atrás un hombre esperaría vivir alrededor de cincuenta años, de modo que cuando terminaba su conscripción militar ya estaba pensando en la necesidad de encontrar pareja y fundar una familia. Por el contrario, el joven de hoy tiene una expectativa de vida de alrededor de setenta y cinco
Page 10